Tres de cada 10 personas de La Araucanía son trabajadores informales, situación que afecta con mayor fuerza a los jóvenes y a los grupos con menor nivel educativo.
Así lo revela un estudio del Observatorio Laboral perteneciente a IDER de la Universidad de La Frontera, donde sus investigadores ven con preocupación estas cifras ya que se instala como un problema multifactorial que afecta a quienes desarrollan actividades informales. En tal sentido, el director del Observatorio Laboral Araucanía, Camilo Rosas, aseguró que "tres de cada diez personas ocupadas en la Región son trabajadores informales, lo que representa un desafío ya que afecta el acceso a derechos laborales y de seguridad social como servicios de salud, protección social, pensiones, entre otros".
El estudio arroja que los sectores silvoagropecuario y pesca, construcción e industrias manufactureras registran niveles elevados de informalidad, a pesar de que también hay una presencia significativa de trabajadores formales en estos sectores.
A la vez, según el último boletín del Instituto Nacional de Estadísticas, INE, la tasa de ocupación informal aumentó interanualmente y llegó a 27,4% en el trimestre enero-marzo 2023 a nivel nacional.
En tanto, las personas ocupadas informales llegaron a un total de 2.472.059 en ese mismo período, lo que representó un alza de 3,1% en doce meses, es decir, hubo 73.174 personas más en esa situación respecto a enero-marzo de 2022.
A juicio del CEP (Centro de Estudios Públicos), la informalidad laboral preocupa por diversos motivos, entre ellos, "porque está asociada a empleos más precarios, a menores ingresos, a un mayor riesgo de caer en pobreza y a una mayor inestabilidad económica y financiera, siendo el grupo de trabajadores más vulnerables ante crisis económicas", aseguran.
Presencia femenina
Según los datos del Observatorio Laboral Ufro, durante el año 2022 el número de personas ocupadas en La Araucanía fue de 407.255, de las cuales el 58% son hombres y el 42% mujeres. Aunque la presencia femenina en el empleo regional sigue siendo menor, la brecha se reduce en dos puntos porcentuales con relación al año anterior.
Se observa además un crecimiento sostenido en el empleo durante 2021 y principios de 2022, con variaciones anuales de alrededor de 50.000 puestos. A finales de 2022 e inicios de 2023, el crecimiento se ha desacelerado, registrando una variación anual de 11.000 puestos, aunque sigue siendo positivo.
La seremi del Trabajo, Claudia Tapia de la Peña, destacó que "el empleo en la Región ha ido creciendo y la brecha de género se ha ido reduciendo progresivamente, lo que es muy positivo. También hemos visto variaciones en la tasa de desempleo en las últimas mediciones, lo que tiene relación con que hay más personas que están buscando trabajo, por lo tanto, volviendo a la fuerza laboral", señaló.
Tapia manifestó además que es importante que las autoridades, empleadores y trabajadores avancen conjuntamente en la promoción del trabajo decente y la formalización del empleo, para garantizar el acceso a derechos laborales y de seguridad social para todas las personas trabajadoras.
"
"Tres de cada 10 personas ocupadas en la Región son trabajadores informales, lo que representa un desafío ya que afecta el acceso a derechos laborales y de seguridad social como servicios de salud, protección social y otros".
Camilo Rosas,, director Obs. Laboral Ufro