Madre de Fabio Gael: "A mi bebé me lo mataron en el Hospital y quiero que se haga justicia"
DRAMÁTICO CASO. La joven Belén Neira (20) está viviendo un complejo duelo tras la muerte de su hijo por una presunta negligencia médica ocurrida el día del nacimiento de Fabito. Tanto Belén como su familia y la comunidad de Nehuentúe esperan que lo ocurrido, no quede en la impunidad.
El que podría haber sido el día más feliz de su vida, se transformó para Belén Neira Santander (20), en la peor de las pesadillas de la que aún no logra despertar.
Fue el 17 de enero pasado en el Hospital Hernán Henríquez Aravena de Temuco donde se desencaderon los lamentables hechos que culminaron en la muerte de Fabio Gael, el primer hijo de Belén y su pareja Dilan Burdiles, quienes esperaban con ansias el nacimiento del pequeño, al igual que toda la familia y la comunidad de la costera localidad de Nehuentúe donde se esperaba con mucha ilusión la llegada del nuevo integrante.
A poco más de tres meses de lo sucedido, por primera vez la madre de Fabio entrega su testimonio públicamente, en especial "para que algo así nunca más vuelva a ocurrir en ningún hospital y que ninguna otra madre" tenga que pasar por lo que ella y su familia han vivido, asegura.
A pesar del enorme dolor, con mucha valentía, Belén próximamente deberá enfrentar el inicio del proceso judicial que decidió llevar adelante junto a sus abogados luego de interponer una querella criminal en contra de todos los que resulten responsables de la trágica muerte de su bebé.
"Lo sucedido fue una negligencia médica, a mi bebé me lo mataron en el Hospital y quiero que se haga justicia", expresa Belén, quien pese a no recordar con precisión todo lo ocurrido el día del parto, dice acordarse de cada una de las caras de los funcionarios que la atendieron, sin encontrar explicación aún a los hechos que culminaron en la muerte de su hijo, por no haberle practicado a tiempo una cesárea debido a que su embarazo era de alto riesgo.
"Yo tenía indicación de cesárea porque mi bebé era muy grande. Pesaba 4 kilos y medio, estaba completamente sano, pero como era grande era complicado que naciera por parto normal por los riesgos que se corrían", comenta la joven, quien dice que una de las matronas le aplicó un técnica que se encuentra prácticamente erradicada a nivel obstétrico llamada "maniobra de Kristeller" que en términos simples consiste en "apretar la guatita de la embarazada" o aplicar presión en el fondo del útero para ayudar al parto vaginal.
"Recuerdo que me apretaban la guata para que el bebé saliera y luego le tironeaban su cabeza, lo que provocaba que yo me deslizara por la camilla y entre varios Tens me sujetaban para que no me cayera", relata Belén, quien hoy se encuentra viviendo un complejo duelo en compañía de su familia y con apoyo profesional de psicólogo y psiquiatra para enfrentar todo el proceso doloroso de perder un hijo en circunstancias "no naturales", según su visión, ya que pudo existir intervención de terceros. "Al forzarlo a salir por el canal del parto, le rompieron su cuellito. Estuvo algunas horas en cuidados intensivos y luego falleció producto de las lesiones", expresa la joven madre, quien tiene la convicción que no le quisieron realizar una cesárea porque "seguramente era muy caro para el sistema de salud", lo que derivó inevitablemente en la muerte de Fabito, sin hasta ahora encontrar una explicación a lo ocurrido.
Desde el Hospital Regional, declinaron referirse al caso y al inicio del proceso judicial que comenzaría el próximo lunes.
"Yo tenía indicación de cesárea porque mi bebé era muy grande. Pesaba 4 kilos y medio y estaba completamente sano".
Belén Neira,, madre de Fabio, que denuncia negligencia médica