Postergación de hospitales I
Nuevamente, con mucha pena nos damos cuenta, que nuestra Región es muy poco considerada a la hora de la toma de decisiones del Gobierno. No me cabe duda que todos sabemos porqué pasa eso. Quiero manifestar mi pesar con los principales culpables de la desidia con que somos tratados, nuestros diputados y senadores.
Una vez más ha quedado demostrado lo débil que son nuestros representantes a la hora de luchar por conquistas y beneficios para nosotros. Da envidia ver a otros parlamentarios de otras zonas, que también llevan mucho tiempo viviendo del Estado luchar y conseguir que sus zonas avances y progresen. Nosotros seguimos detenidos.
Entre tantas cosas, el problema mapuche, que nadie toma en serio. No han logrado convencer al Gobierno de la verdadera problemática en nuestra zona. La ausencia de estos señores en la marcha de nuestros camioneros a la Moneda para luchar contra la delincuencia. No se vio a ninguno de ellos, apoyándolos ahí, donde las papas queman, cuando en Santiago, "nuestras autoridades", no los querían recibir. Y ahora para coronar todo, nuestra ministra de Salud, representante de la Presidenta, nos ha comunicado que la construcción de los dos hospitales que estaban proyectados para esta zona, Padre Las Casas y Angol, deberán seguir durmiendo el sueño de la esperanza. Qué pena una vez más tenemos que esperar, pero no nos olvidemos, que aquí en Temuco, por lo menos, los señores García, Tuma, Saffirio y Becker luego van a pedir nuestra ayuda, nuestro apoyo para las elecciones.
A lo mejor nos acordamos y se la cobramos. Aunque generalmente tenemos mala memoria y los terminamos reeligiendo. Por eso no se preocupan y siguen su vida tranquila.
La Región puede esperar...
Agustín Rivas
Postergación de hospitales II
Estoy de acuerdo con su Editorial (Postergación de hospitales, 5 de octubre) . Agregaría que en el intertanto la autoridad debe contemplar un plan de contingencia para tres a cuatro años en las zonas deshabitadas de la torre antigua del Hospital Regional, que da a calle Montt.
Allí se han instalado oficinas administrativas y nada de lo esencial que es la acción sanitaria. Falta de camas todos los días ponen en riesgo a los pacientes, a los equipos de salud y médicos que deben rechazar las hospitalizaciones y, por cierto, al Servicio de Salud.
Es comprensible el retraso pero debe acompañarse de un plan de contingencia.
Ricardo Celis
Funa en la UCTemuco
Mientras participaba en un debate sobre aborto en la Universidad Católica de Temuco, junto a representantes del Partido Socialista y del movimiento Amplitud, irrumpió un grupo feminista radical que, por medio de gritos e insultos, intentó detener el evento.
Desafortunadamente la casa de estudio optó por ceder a las presiones de los manifestantes y suspendió la actividad. Una alarmante concesión a quienes por medio de funas buscan censurar el debate y una grave renuncia al compromiso por la búsqueda de la verdad que toda universidad debe tener.
Lamento que se prefiera no contrariar a grupos radicalizados en vez de proteger los espacios de discusión y la libertad de expresión.
Cristián Araya, Fundación Jaime Guzmán
Homo sapiens
Con respecto a la carta del señor Carlos Rojas sobre el "Conflicto en la Región" y a la foto (también aparecida en la página 21 de la edición del 2 de octubre) donde en una pancarta dice "nuestra raza es imbatible y lo sabrá todo el país", es conveniente aclarar que la convivencia humana pacífica debe partir sabiendo ante todo que existe una sola especie humana.
Aunque por mucho tiempo se acallaron las investigaciones de Mendel, la genética ha seguido su camino para confirmar que no hay diferentes razas y que: mapuche, aymarás, kunzas, inkas y desde hace menos años: chilenos, alemanes, suizos, argentinos, bolivianos, peruanos, etc., somos todos -ni más ni menos- que Homo Sapiens-Sapiens.
Edgar Veas
Profesionales sin título
Hipocrátes creó o se hizo cargo de un centro médico y una escuela de medicina en la isla de Cos. Durante años enseñó a todo el que deseara aprender.
Al morir, Cos estaba llena de médicos, estudiantes y discípulos y la competencia era feroz.
La solución para "racionalizar el mercado" eliminando la "competencia desleal" fue la elaboración de un Código de Conducta, que denominaron "Juramento Hipocrático" en honor a su maestro.
Las licencias, los títulos profesionales, entre otros, son un mecanismo que tienen los grupos de presión de cada arte o ciencia para limitar la oferta de trabajo.
Mis respetos para Juan Manuel Astorga, un gran profesional de las comunicaciones sin título profesional de comunicaciones.
Juan Pablo Caneo