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El "orgullo" de Villa Turingia: vecina sigue llena de vitalidad a sus 106 años

LONGEVIDAD. La centenaria mujer, oriunda de Imperial, es hoy una de las personas de más edad de La Araucanía y el país. A continuación parte de su historia de vida.
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Erick Turrieta

Nació el 12 de julio de 1912. Vive el día a día sentada en una silla de ruedas que la traslada por su casa, ubicada en la Villa Turingia de Temuco; convive con su marido, veinte años menor, quien la acompaña y le brinda todos los cuidados necesarios, quehaceres que, a sus 106 años, Filomena Mora, no puede realizar. Si bien, se encuentra completamente lúcida y consciente de la historia que le ha tocado vivir, padece de algunos problemas físicos, que sin embargo no le imposibilitan recordar más un siglo de vida. Por eso es ella misma quien relata los pasajes caminados a lo largo de su andar en compañía de su esposo, con quien lleva 54 años de matrimonio.

Su vida

Rememorando su larga vida, la centenaria vecina señala que fue criada en el campo, en la comuna de Nueva Imperial. Su madre falleció cuando ella tenía apenas 5 años, quedando, junto a sus seis hermanos, bajo el cuidado de su padre.

"Fue muy triste" relata a El Austral. "Sufrimos mucho en nuestra infancia".

En su juventud, doña Filomena se trasladó a Temuco, donde aprendió a confeccionar ropa, tejer y bordar, oficios que le permitieron trabajar en la capital regional por más de 33 años como asesora del hogar.

"Trabajé muchos años en la casa de una doctora, muy buena señora la doctora Araya, le crié a sus hijos y parte de sus nietos, fueron tiempos muy lindos, les recuerdo con mucho cariño", asegura.

Al consultarle cómo es que ha llegado a vivir más de 100 años, detalla que "la alimentación de antes era muy distinta, se comía mucha legumbre, porotos, garbanzos y no tanta carne como hoy", agregando que en su vida estuvo libre de vicios como el cigarro y el alcohol.

"Esas cosas no, ni por amor a Dios, jamás en la vida, en mi casa no se vio nunca, ni por parte de mis hermanos ni de mi papá tampoco, nunca se vio que llegara un hijo borracho a la casa, con olor a cigarro, nada de nada, menos vino", afirmó tajantemente.

Sobre la actualidad

Al preguntarle sobre cómo ve el comportamiento de las "nuevas generaciones" y de la realidad que actualmente vive, relata que "lo que está sucediendo ahora es algo terrible, ni parecido a lo de antes, ahora es una cosa de que al mundo no sé qué es lo que le pasa, una barbaridad, todos oprimidos, cuando no es una pena, es la otra, y así", aseveró.

Sobre cómo ve el diálogo entre jóvenes y adultos, comenta que "hacen burla de los padres y siempre hacen lo que ellos quieren, no es lo de antes. Cuando llegaba la hora de almuerzo, todos estábamos sentados en la mesa, mirándonos las caras", detalló, resaltando también la crianza que recibió de su padre: "No se oía nunca una mala palabra, solo cariño y un respeto único".

Respecto de las dolencias que la aquejan, pese a su vitalidad, afirma que "me duele el estómago, esta rodilla no puedo casi ni afirmarla", asegurando que se aburre estando sentada. "No era mi costumbre estar así, pero que se le va a hacer, paciencia para todo, sí o no".

MATRIMONIO

Doña Filomena lleva 54 años "felizmente" casada, siendo su marido quien actualmente la acompaña en el cotidiano.

"Ha sido un hombre muy bueno, con todo el mundo, quedamos solitos, siempre solos", apunta la centenaria vecina de Villa Turingia, quien pese a no haber tenido descendencia asegura que "estoy agradecida por la vida que me ha tocado vivir".

"No se oía nunca una mala palabra, solo cariño y un respeto único".

Filomena Mora Gajardo,, vecina de Villa Turingia

Recuerdos de más de un siglo

"Me gustaba mucho cuando mi papá tocaba la guitarra, el acordeón también me encantaba, él cantaba unas canciones muy lindas, nosotros nos reuníamos todos alrededor mirándolo cómo tocaba", rememora esta vecina temuquense de 106 años, y agrega que "cuando murió mi mamá, lloramos mucho, quedamos solos, todos chicos, sufrimos mucho. Mi papá se esforzó por darnos una buena crianza con mucho cariño y respeto. Echo de menos también la casa y las personas donde trabajé, las recuerdo siempre".

Sernapesca y la Armada decomisan malla de pesca ilegal en Toltén

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Tres redes de pesca, de tipo enmalle, que en total superan los 120 metros de extensión, fueron decomisados por personal de Sernapesca, en el marco de un trabajo interinstitucional realizado en conjunto con la Armada de Chile para combatir la pesca ilegal que afecta a la cuenca del río Toltén.

Mauricio Steffen, encargado de Fiscalización de Sernapesca Araucanía, explicó que los pescadores ilegales calan redes de lado a lado en los ríos para captura masiva de salmón chinook. Aquello es ilegal, porque el único lugar permitido es en Caleta La Barra, precisamente en la desembocadura del río Toltén, en la comuna de Nueva Toltén.