Carahue: Bellezas naturales
Conocida como la "Ciudad de Tres Pisos", Carahue cautiva al visitante con su mezcla perfecta de bellezas naturales y atractivos arquitectónicos.
El paisaje costero de la comuna tiene caras muy distintas. Partiendo por la zona urbana, es posible reconocer cada uno de sus "tres pisos". El primero, la ribera del Río Imperial, más específicamente en la Villa Damas; el segundo piso, la plaza de la ciudad y sus alredeores, y el tercero y más alto, las inmediaciones del Club de Rodeo, a la salida hacia Imperial.
Otro atractivo urbano sin duda que es su museo de locomóviles al aire libre. Ubicados ordenadamente a lo largo de Avenida Ercilla, son un homenaje al empuje de los colonos que tenían en estas máquinas el motor de su desarrollo.
el río imperial
Carahue sale de la ciudad y toma rumbo al mar siguiendo la zigzagueante cinta del Río Imperial.
Tras pasar bajo el Puente Atirantado, la primera parada para el turista es el antiguo Molino Valck, edificación de cuatro pisos y que en sus momentos de gloria se enlazaba con los vapores y el ferrocarril para mover la producción de la costa.
El camino continúa, apareciendo Tranapuente, trovolhue, la entrada a la Ruta Lafkenche. Pero siguiendo rumbo oeste, pronto aparece la pintresca caleta de Nehuentúe y su turismo gastronómico. El pequeño pueblito de pescadores es sin duda un punto obligado a la hora de conocer la costa. Desde allí, además, se puede ir a Monkul, lugar de playas y dunas, o cruzar en el pequeño transborador hacia Puerto Saavedra.
El MAR
Dejando atrás el imponente Río Imperial -navegable- otra opción del visitante es seguir la Ruta Lafkenche, rumbo a Tirúa y a la Región del Biobío, recorriendo una atractiva batería de playas marinas. Coi Coi, Los Obispos, Casa de Piedra, son algunas de estas joyitas, todavía poco conocidas.