El Cuerpo de Bomberos debe ser una de las instituciones más arraigadas en el corazón de la ciudad. Por sus filas han pasado ilustres personajes, que no solo contribuyeron al crecimiento de la entidad, sino que también fueron cruciales en el proceso de desarrollo de la capital regional.

Hablar de Bomberos es referirse no solo a una institución emblemática que se dedica a proteger a la población ante emergencias. Hablar de ellos, es reflexionar acerca de los soportes más valiosos de una sociedad, como la solidaridad y la lucha desinteresada por el bien común.

Hoy la institución cumple 121 años en Temuco, y lo hace sin grandes alardes de su tremenda tarea en la ciudad. Lo hace con la misma sencillez que la caracteriza, agradeciendo a la ciudadanía y transmitiendo confianza acerca de su trabajo.

Bien sabemos cada año que la institución debe hacer verdaderos malabares para poder autofinanciarse y brindar el servicio que la comunidad espera.

Las subvenciones que recibe por parte de los municipios, aunque el temuquense ha destacado por su creciente apoyo, no son suficientes para cubrir todos los gastos, por ello deben recurrir a una serie de beneficios, como rifas y alianzas, para solventar los millonarios costos operativos. ¿Es eso justo? La verdad, es que ni los mismos bomberos tienen una respuesta. Para ellos, uno de sus grandes orgullos es su condición de voluntarios y, quizá por ello, no presionan como debieran para acceder a más recursos públicos.

Actualmente el Cuerpo de Bomberos temuquense es liderado por su superintendente Leonel Nualart y su comandante Claudio Magofke, quienes han realizado un labor destacada no solo por la comunidad, sino que también por sus propios pares, que ve a una instituciones querida y confiable por la mayoría de la población.

Junto con desearles un feliz cumpleaños y agradecerles su entrega sin condiciones, es oportuno también solicitar a la comunidad que los siga apoyando en sus actividades. Los bomberos han entregado su vida por Temuco y su gente.

La política en salud mental ha tenido importantes procesos de re-evaluación y seguimiento, un ejemplo de ello son numerosas iniciativas de estudios y publicaciones que se han desarrollado desde perspectivas cuantitativas, donde los criterios de análisis corresponden a tasas y porcentajes (disminución de hospitalización, aumento en relación a la oferta programática, descentralización de las mismas, etc.). Si bien estos estudios dan cuenta de avances importantes, no hablan de algo tan relevante como la subjetividad desde los usuarios, de sus familias y comunidad, la consideración experiencial y vivencial de las personas a las cuales los conjuntos de acciones debieran beneficiar.

Existen modelos y/o enfoques que intentan llegar a la humanización de la atención de las personas, como el de recuperación, derechos humanos, comunitario, estigma/autoestima por nombrar algunos. Estos proponen un trabajo que de forma constante y sistemática considere a los sujetos de forma integral y su discurso relevándolos en un plano donde ellos son los protagonistas de toda política, intervención y de las actividades que de ellas se desprendan.

El desarrollo en esta línea queda en evidencia al considerar la actitud actual de las personas afectadas por una situación o condición de salud mental, desde la perspectiva de volverse activos, empoderarse e involucrarse, en la autodeterminación y automanejo de las situaciones de salud de las personas, en aquellos procesos sociales que buscan la des-estigmatización y acabar con los prejuicios.

Si bien existe importante información acerca del impacto que la implementación de estos ejes tiene en la salud, tanto a nivel general como en el aspecto mental de los colectivos, no contamos con estudios en los cuales se establezca desde la propia experiencia de los sujetos. Por lo tanto, la academia debe hacerse parte en este cambio cultural, enseñando en sus aulas una ética de reconocimiento hacia todas las personas (con o sin diagnóstico médico), y desde ahí enseñar a diseñar planes, programas, y políticas que resguarden toda dignidad humana.

Claudio Acevedo Benavides

académico Escuela Terapia Ocupacional U. Andrés Bello

Hoy es el Día "D" para las jóvenes que pretenden ceñirse el cetro de Reina de las Playas y Piscinas de la IX Región, para así postular al título nacional, que se disputará en Arica en junio próximo.

Inscripciones se reciben en la dirección regional de Turismo. Deben tener entre 16 y 25 años.

Cien chivitos fueron asados en fiesta de Lonquimay

Nada menos que cien chivitos fueron perfectamente asados ayer en una nueva versión de la Fiesta del Asado de Chivo de Lonquimay, encuentro costumbrista que ya se ha hecho conocido en La Araucanía y el país por la excelencia de su gastronomía.

Miles de personas se sumaron a la fiesta, y disfrutaron del tradicional plato.

Incendio destruyó Notaría Alarcón, en pleno centro

Noventa bomberos y siete compañías acudieron al incendio de la Notaría Alarcón y oficina de Cruz Blanca, en pleno centro de Temuco. Pese a que el primer carrobomba apenas demoró 1 minuto y 30 segundos en llegar al punto de la emergencia, el edificio quedó reducido a cenizas. Conmoción causó el siniestro entre los transeúntes.