Natalia Bravo Hodges
Manuel Martínez Contreras es artesano en madera nativa y en metales nobles. En su trayectoria como orfebre en La Araucanía y en Chile ha sido reconocido y destacado en su quehacer, obteniendo sellos de excelencia y medallas al diseño y la innovación.
En la actualidad, vinculado en el área de la gastronomía, confecciona colecciones y series de objetos utilitarios para la cocina contemporánea chilena, aplicando como columna vertebral la investigación del mundo apuche.
- ¿Cómo definiría el mundo artesano en el que se desenvuelve?
- Todos los días se va armando un ritmo, como una sinergia yo creo. Es imposible detener el tema desde lo creativo, te pueden afectar las cosas externas, pero no te puedes quedar quieto mucho tiempo. Bajo esa chispa inicial nace la necesidad de generar algo, ya sea recurso económico, eso es a través de la venta del producto, pero culturalmente lo que hay detrás de cada pieza es un estudio, un proceso de creación y desarrollo que va desde el territorio, cómo se vincula ese objeto con el territorio, pensando también en todo lo que es contemporáneo y no solo me refiero a la forma, sino también en los hábitos de comer.
- Actualmente trabaja para importantes y destacados restaurantes del mundo ¿Cómo llegó a ese nivel?
- Llegué buscando y preparando el camino desde el hacer piezas con sentido, piezas 100% utilitarias y que fueran aplicadas a un grupo de personas que son más amantes del área de la gastronomía. Hay personas que lo llevan más allá y que disfrutan de todo lo que lo complementan, de lo estético, de los sabores y de las experiencias de transitar por ese tipo de lugares. Ahora preparar las piezas para ese tipo de restaurantes ha sido muy bueno desde el punto de vista creativo, porque tienes toda la libertad del mundo, acompañas a otras personas que es super importante en la evolución humana, los cocineros. En Chile tenemos excelentes cocineros, que están siendo reconocidos por sus pares a nivel mundial, tres de ellos son; Rodolfo Guzmán, Benjamín Nast y Cristian Sierra, son tres personas que nos acompañan y con los que trabajamos en conjunto, muchas veces me estoy cuestionando la forma de las piezas y acudo a ellos.
- ¿Qué piensa de esta unión tan profunda de la cocina y la artesanía?
- La gastronomía y la artesanía nunca deberían separarse, siento que en algún minuto algo pasó que se desconectaron, pero hoy, en mi caso, mi idea está en reconectar esos dos hilos.
- Frente al panorama de la crisis sanitaria ¿En qué ha estado trabajando y cuáles son sus proyecciones?
- A veces transita la angustia y esto de la incertidumbre, pero por otro lado bien bipolar con mucho optimismo, porque me la he pasado bien aislado. He trabajado duro, me encerré varios días a trabajar, a hacer fotos para el catálogo de edición limitada que es en lo que nos estamos enfocando. También ha sido instancia para pensar y ver como comercializar nuestros productos porque creo que hay que reinventarse en todas las áreas, tener un comercio más contenido, más consciente, menos cantidad de piezas, pero con muy alto valor, entonces es hora de aplicar toda esa artesanía medio utópica que existe. Es tiempo de tomar conciencia de tomar el valor agregado del ser humano y del trabajo que tiene cada uno y también de que no hay que comercializar por comercializar.
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"La gastronomía y la artesanía nunca deberían separarse, siento que en algún minuto algo pasó que se desconectaron, pero hoy mi idea está en reconectar esos hilos". La Araucanía no solo es rural, también tiene su lado urbano, histórico contemporáneo y eso también se puede mostrar".
Tres series de piezas
Respecto de las tres destacadas series de piezas de este artesano, señala que "son específicamente mi recorrido por la Región, es mi visión, la forma de cómo yo me voy alimentando de forma intelectual, recogiendo información desde la academia hasta lo que me entrega la tierra. Es una serie mirada desde arriba, de las verticalidades, porque la gran serie se llama Wallmapu y de ella nacen tres; Lafquenche, Pehuenche y Wenteche. Y son piezas que muestran todo lo que es la Región de La Araucanía desde su lado más urbano, porque La Araucanía no solo es rural, también tiene su lado urbano, histórico contemporáneo y eso también se puede mostrar.