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Pan para hoy y hambre para mañana
Hace algunos días el Gobierno dio a conocer un paquete de medidas para ir en apoyo a la clase media, el cual fue complementado con un segundo paquete anunciado previo a la votación del retiro del 10% de los fondos de pensiones.
Las últimas propuestas dadas a conocer por el Ejecutivo apuntan en la dirección correcta y son mejores por varias razones, sobre todo cuando se trata de evitar los perjudiciales efectos que tendría el retiro de los ahorros para la jubilación de los chilenos.
Es necesario que el debate que se realiza durante estos días sobre la protección social a las familias en contextos de crisis sea llevado a cabo con responsabilidad. Dicho esto, más que promover el retiro de los ahorros previsionales, es necesario que las políticas públicas estén dirigidas a perfeccionar las medidas de protección social propuestas por el Gobierno.
Permitir el retiro del 10% de los ahorros previsionales es pan para hoy, y hambre para mañana.
Llino González Quezada, presidente UDI Temuco
Pensiones: "discursos peligrosos"
Se defiende y ataca el sistema de pensiones, como si fuera el único argumento para solucionar los problemas de la vejez, cuando no lo es. Cuidado, porque podemos alimentar expectativas falsas a la sociedad.
Para mejorar la calidad de vida de las personas mayores, aumentar las pensiones o cambiar el sistema puede ser insuficiente. Necesitamos construir políticas públicas de envejecimiento y vejez multidisciplinarias, con una mirada intergeneracional y de inclusión social, de lo contrario, sentiremos que hemos tropezado nuevamente con la misma piedra.
Michel Toledo Ortiz, presidente Fundación Derechos Mayores
Juego de suma cero
¿Cuándo será el día que la clase política priorizará el bienestar social por sobre la potencial ganancia política? Lamentablemente, en tiempos donde necesitamos estar unidos para conseguir soluciones en forma de política pública que beneficien a la mayoría y sean económicamente sustentables, pareciera que algunos se las ingenian siempre para imponer su propia agenda política como soluciones de fondo.
Si convenimos que el nuevo paquete de medidas para ayudar económicamente a los ciudadanos que han visto afectados sus ingresos producto de la pandemia covid-19 representa un alivio significativo, ¿cuál es el fin de seguir insistiendo con el retiro del 10% de los fondos de las AFPs?
En noviembre pasado contemplamos que la solución ofrecida por los parlamentarios al "estallido social" fue un plebiscito para cambiar la Constitución, aun cuando las prioridades manifestadas por la ciudadanía (pensiones, salud, educación, Sename, justicia, etc.) eran diferentes. Ahora, siete meses después, volvemos a un escenario similar.
Siempre es posible debatir sobre las mejoras o, incluso, reemplazo de las herencias de la dictadura militar. Sin embargo, en noviembre no era prioridad buscar la forma de derribar la constitución de 1980, como hoy no es prioridad debilitar el sistema de AFPs con la intención de pavimentar su desaparición. En consecuencia, nos vemos envueltos en un juego de suma cero ineludible debido a que muchos perdemos por demandas insatisfechas a costa de las ganancias políticas de quienes impulsan agendas personales por convicciones, si bien legítimas, intrascendentes en una situación de tensión social o emergencia sanitaria.
Claudio A. Navarro G.
Gobierno reactivo
Importante es el anuncio realizado el día martes por el Presidente Sebastián Piñera respecto al Plan Fortalecido de Protección a la Clase Media, que pretende hacer hincapié en cuatro ejes: bono a la clase media, préstamo estatal solidario, protección a la vivienda y educación.
A su vez, se presenta como una alternativa al retiro del 10% del fondo de pensiones, si bien esta propuesta ha sido destacada por algunos y criticada por otros, no podemos dejar de analizar el tema de fondo que tiene un estrecho vínculo en cómo se presentan las iniciativas, ya que se proyecta una imagen de Gobierno que otorga soluciones de carácter reactivo cada vez que se ve en aprietos, es ahí donde debe mejorar la gestión y anticiparse a situaciones complejas, de tal manera que sus proyectos no siempre sean rotulados de "medidas de urgencia".
Francisco Santibáñez Soto, administrador público, Licenciado en Ciencias Políticas y Administrativas