Panaderías: en 40% bajan las ventas y cambian los hábitos de consumo
PANDEMIA. Locales concentran la jornada laboral en un solo turno adelantando el cierre. Clientes prefieren molde o precocido.
En un 40% en promedio han bajado las ventas del centenar de panaderías que hay en Temuco producto de los efectos de la pandemia, desde el punto de vista económico y comercial, además de los consiguientes cambios de hábitos de consumo de sus clientes.
Así lo corroboraron las panaderías Licán Ray (sus dos locales céntricos ubicados en Antonio Varas y Vicuña Mackenna), La Hogaza (San Martín 813) y El Sol (Lautaro 1418 esquina Pinto).
Bajan ventas
La cajera Mónica Benavente de la panadería Licán Ray (el local de Vicuña Mackenna), corrobora la baja en las ventas y, por ende, una menor producción, argumentando que ha sido notorio el impacto al no poder consumir al interior del local.
"Se está vendiendo menos porque ya no existe el consumo en el interior del local, y aunque haya desconfinamiento, al menos en este local es muy reducido el espacio para atender a personas separadas", cuenta Benavente.
La encargada de la panadería La Hogaza, Johana Ceballos, corroboró la baja en las ventas reportando además que hubo un alza en la harina en abril. "Aguantamos hasta los primeros días de junio para subir el pan, pero no fue más de un 3%, con todo lo que está pasando se ha visto como ya no vienen todos los días los clientes habituales", comentó.
Nuevo escenario
Todas las panaderías consultadas están funcionando al menos con la mitad de su personal y han debido concentrar la atención en un solo turno, adelantando la hora de cierre, no solo por razones de merma en la demanda, sino que también por falta de locomoción y el toque de queda.
Desde la panadería La Hogaza, la encargada, Johana Ceballos, señaló que "antes atendíamos con el doble de personal de lunes a domingo, desde las 8 de la mañana hasta las 21 horas inclusive, en cambio ahora lo hacemos de lunes a sábado, desde las 10 de la mañana hasta las 7 de la tarde, porque no hay tanta locomoción como antes y tenemos personal desde Pitrufquén hasta Labranza", indicó.
Otros hábitos
Durante estos meses, las panaderías también han visto cambios en los hábitos de consumo de sus clientes. Hoy compran menos por razones económicas y porque se volvió a instalar la costumbre de hacer el pan en casa, por el confinamiento.
Por lo mismo, advierten de la mayor salida que tiene en estos momentos el pan precocido y el molde, por sobre las otras especialidades. La repostería, en general, también ha quedado relegada como un producto suntuario.
Así lo comenta Ceballos, de La Hogaza. "Estamos vendiendo el pan básico no más, ya no hay especialidades como antes, como la gente ya no hace eventos, tampoco se está consumiendo. Ahora ha bajado el pan corriente y se pide más el pan precocido y el molde".
"
"Las ventas han bajado porque además la gente prioriza. El que antes compraba pan, cecina y kuchen, ahora ya no lleva el kuchen. Se ve que hoy los clientes no se dan gustos innecesarios". Johana Ceballos, encargada La Hogaza