Correo
Desconfinamiento
Compartir estrechamente con las personas queridas es lo más esperable hoy, ya que genera la esperanza de que pronto podremos volver a recuperar lo perdido. Bajo este contexto, será la expectativa lo que hay que manejar, dado que cada persona la significará de acuerdo con sus necesidades, pudiendo ser motor de malestar psicológico.
Por otra parte, la conciencia que se posee por el esfuerzo de mantenernos confinados propicia un aumento del deseo y añoranza por rutinas pasadas; sin embargo, se encuentran con algo sustantivamente distinto a lo recordado, lo que puede implicar un aumento en la sensación de inseguridad, producto de estar en un ambiente no familiar, surgiendo estrés y ansiedad. Debido a esto, hay que tener claridad que no estamos volviendo a un estado inicial y asumir una nueva condición.
Bajo este contexto, debemos preocuparnos de la gestión emocional, ya que muchas veces no tenemos conciencia que somos presos de emociones disfuncionales o negativas. De esta forma la sugerencia es desligarse de estados emocionales que producen malestar y así poder tomar buenas decisiones, mejorar nuestras relaciones interpersonales, tratar de no mantener esos recuerdos sobre lo feliz que éramos en una condición pasada, hay que lograr soltar eso que nos mantiene anclados al pasado.
Finalmente, debemos ser austeros con las expectativas, es decir, ser realistas, asumir que se requiere un cambio conductual y esforzarnos aún más en las cosas positivas, ver todo lo que hemos avanzado, como por ejemplo, el haber sido solidarios por tener resguardos para que otros no se contagien. Este es un acto positivo y que habla de los valores de cada persona y de su capacidad de generosidad y bondad.
Luis Pino, académico Escuela de Psicología Universidad de Las Américas
Emprender y colaborar
La Araucanía lleva varios años impulsando la colaboración como un mecanismo de acción real para el surgimiento de nuevos emprendimientos y de una mayor sofisticación de los mismos. De hecho, hace 2 años se conformó la Mesa de Ecosistema para el emprendimiento e innovación de La Araucanía con el apoyo y compañía de Corfo, quien impulsó este movimiento a lo largo de Chile.
Es así como en nuestra Región catorce instituciones públicas y privadas estamparon sus firmas para comprometer el apoyo a esta iniciativa. Hoy ya son más de treinta instituciones que trabajan a la par para entregar nuevas y mejores herramientas a los emprendedores y empresarios de la Región, en búsqueda de nuevas oportunidades de desarrollo.
Desde una mirada global, hemos podido apreciar como gracias a estas acciones de colaboración nuestra Región, no solo ha aumentado el número de emprendedores, sino que también ha aumentado el número de capital público y privado que se ha traccionado hacia la Región, lo que eventualmente se transformará en nuevas iniciativas que irán tirando del carro de un desarrollo sostenible y de impacto para quienes la habitamos.
Por otra parte, hemos podido ver como los servicios que se entregan para llevar a cabo estas iniciativas, han aumentado su número y su profundidad, mejorando el capital humano del territorio lo que en el mediano plazo impactará en mejores iniciativas y en nuevas oportunidades, instalando temas de ciudad inteligente (smartcity), de inteligencia artificial, de agro inteligente (smartagro), de educación y tecnología, en fin, un sin número de temas en donde hoy nuestra Región marca pauta y genera contenido para ser replicado en otros territorios, que en algunos casos traspasa las fronteras del país, y todo gracias al espíritu colaborativo y al pensar colectivo en una Araucanía que se presenta al mundo como una fuente inagotable de emprendimiento e innovación.
Cristian Campomanes, presidente de la Mesa Ecosistema Emprendimiento Araucanía y gerente de Incubatec Ufro
Dependencia
Como nunca, desde que tengamos memoria, nuestra sociedad se ha vuelto tan dependiente de internet. La pandemia ha trastocado absolutamente todo, y es así que hoy el trabajo, el estudio, las conversaciones familiares, los negocios, la compra y venta, informarnos, absolutamente todo está relacionado con la gran red, y quedarse sin internet por unas horas -no digamos unos días- resulta impensable.
Así es como van las cosas. A la falta de cercanía social hay que sumar ahora la absoluta dependencia de internet, de las redes sociales, de Facebook, de Twitter, de Instagram, de wsp.
Karla Barría