Joven mecánica busca que los talleres se consideren "de primera necesidad"
TRABAJO EN PANDEMIA. Emprendimientos luchan por poder atender en cuarentena.
La cuarentena total indefinida que rige desde las cinco de la mañana de este sábado busca que la menor cantidad de gente se movilice, con el objetivo de disminuir la propagación y circulación del coronavirus. Sin embargo, la obligación de cierre de locales y comercios genera profundas consecuencias negativas para sus dueños y trabajadores, y también para aquellos que se ven impedidos de recibir atención de servicios específicos que se ven forzados a cerrar sus puertas.
Así es el caso de los talleres mecánicos o establecimientos de servicio técnico automotriz, que no pueden abrir sus puertas ni tampoco ejecutar labores al interior de los espacios privados, por disposición de la autoridad sanitaria.
Silenciosamente, los talleres de Temuco y otras comunas de La Araucanía que han pasado por semanas de cuarentena total, han ido cayendo poco a poco en números negativos que los llevan peligrosamente hacia la quiebra o cierre.
Por lo mismo, una joven mecánica de Temuco quiere convocar y reunir a todos los talleres mecánicos (formales e informales) de la Región y del país para sumar fuerzas y solicitar que se les declare como un servicio o comercio "de primera necesidad", de manera que puedan atender y seguir solucionando problemas automotrices.
Una necesidad
Waleska Morales (31 años) fundó el taller "Turbo Woman" en el año 2018, convirtiéndose en el primer servicio mecánico automotriz atendido y operado en un 100% por mujeres. Ahora, busca en ser la fundadora y líder del primer gremio de talleres mecánicos y servicios técnicos automotrices de Chile.
"Lo primero que queremos hacer saber y llamar a reflexionar es que hoy los autos no son un lujo, son una necesidad para quienes no pueden parar en la cuarentena y son una herramienta de trabajo para aquellos que tienen que seguir repartiendo cosas o trasladando a otras personas en medio de este confinamiento", argumenta.
"Los talleres chicos y los grandes, formales o independientes sin estar regularizados, se ven obligados a no poder ejecutar trabajos pendientes y no poder recibir trabajos, lo que causa pérdidas inmediatas en los ingresos normales de los negocios. Han sido muchos colegas los que han tenido que cerrar porque no han podido pagar el arriendo de sus locales al no poder terminar trabajos", explica.
"Hay negocios que se han organizado y que han podido expresar sus argumentos, como los gimnasios y la construcción. Yo quiero que exponer este problema y sumar a colegas que estén en la misma para que se nos pueda declarar como un servicio de primera necesidad, porque eso somos. Somos los doctores de los autos y las máquinas se enferman, independiente de si estamos en cuarentena o no, y ahora se están quedando sin ser atendidos", concluyó.
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"Estar en cuarentena significa que no podemos terminar los trabajos pendientes y no podemos recibir casos de emergencia, todo eso es lo que queremos que sea revertido".
Waleska Morales,, impulsora de la iniciativa