Por tres horas se extendió la declaración del exministro del Interior, Andrés Chadwick, en el marco de la jornada número 26 del juicio por la muerte de Camilo Catrillanca Marín (24), quien falleció tras recibir un disparo en la cabeza por parte de un funcionario del "Comando Jungla" de Carabineros, el 14 de noviembre del 2018 en Temucuicui, Ercilla.

El exsecretario de Estado, de 64 años, prestó declaración por videoconferencia desde un tribunal de la ciudad de Santiago y comenzó a ser interrogado por el fiscal Roberto Garrido, de la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía, a las 9:28 horas.

"minutos intensos"

Chadwick recordó que durante la tarde de aquel día miércoles él estaba en su oficina, en La Moneda, y fue informado en primera instancia de lo ocurrido por el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, quien, a su vez, recibió la información de parte del general inspector (r) Christian Franzani, que era jefe de la Dirección de Orden y Seguridad.

El exministro contó que en los primeros minutos, que calificó como "de mucha intensidad", intentó tomar contacto con el general Mauro Victtoriano, jefe de la Zona "Araucanía Control Orden Público", pero dijo que tuvo "muchas dificultades, como interferencias y ruidos" .

"Al tomar conocimiento de este documento yo estaba en calidad de vicepresidente. Tomé contacto con el Presidente de la República, que estaba de gira en Asia, y le di cuenta de los hechos", confidenció el abogado.

"Luego de hacer un punto de prensa, tomo contacto con el general Soto y le instruyo que se realice un sumario administrativo (...) y hasta entonces lo que se había señalado por (los funcionarios de) la patrulla (del Gope), y que había trascendido públicamente, es que no habían cámaras con registros de lo ocurrido o no se habían utilizado en el procedimiento".

REVELACIÓN de cámaras

"El día sábado 17 estaba en mi casa y recibo un llamado del general Soto, me dice que necesita una reunión urgente y le digo que lo recibo en mi casa. Ahí me señala que recibió información de que uno de los miembros sí portaba una cámara GoPro, a diferencia de lo que me había señalado el día anterior y lo que habían dicho en los días anteriores", dijo.

Chadwick aseguró que el Gobierno desde un primer minuto intentó, mediante las conferencias de prensa, insistir y enfatizar en que lo se sabía era "el relato y la versión de Carabineros" y que "la intención del Gobierno era que se investigara la verdad toda".

"Carabineros nunca me hizo referencia a que Camilo Catrillanca hubiese estado armado. En el resumen ejecutivo, uno de los antecedentes señala que no hubo incautación de armas. Nunca se me señaló que ellos, que estaban en el tractor, hubiesen estado armados. Se hacía referencia a un enfrentamiento, pero con terceras personas y que los disparos provenían por los costados, a través de la vegetación del lugar", enfatizó el exministro.

"Era conveniente informar lo que se sabía, por transparencia ante la ciudadanía, eran momentos de mucha intensidad". Andrés Chadwick, exministro del Interior

Conmovedora fue la declaración que prestó ayer Marcelo Catrillanca Queipul (50 años), en el juicio por el asesinato de su hijo, Camilo Catrillanca Marín (24).

El reconocido dirigente mapuche ingresó al tribunal de Angol y se sentó, por primera vez, en la sala donde se está desarrollando el proceso judicial en contra de los excarabineros.

El fiscal Roberto Garrido le preguntó por qué había aceptado declarar en calidad de testigo, a lo que Catrillanca respondió que tiene "esperanza en que se pueda hacer justicia".

Al recordar la jornada en que su hijo murió, Catrillanca se quebró y comenzó a sollozar. "Esto abre nuevamente la herida que tenemos como familia. Estaba en mi casa cortando madera y la gente empezó a gritar que a Camilo le habían disparado. Traté de llegar lo antes posible al Cesfam de Ercilla y cuando llegué ya era tarde. Le toqué su cara y le dije que descansara en paz", dijo emocionado.

"Me he tenido que hacer cargo de mi nuera y de las dos hijas de Camilo, que ahora son como mis hijas. Para mí es difícil que la menor me dice papá a mí y nunca podrá tener la felicidad de haber conocido a su papá", prosiguió.

"Espero justicia terrenal, una condena ejemplificadora, pero también creo en la justicia de nuestro Chau Ngenechen (Dios)", cerró Catrillanca.