El con inesperado aterrizaje del coronavirus en nuestro país y el repliegue de los ciudadanos a sus hogares, la vida, tal como la conocíamos, experimentó un cambio radical. El inicio de las cuarentenas en algunas ciudades y la recomendación de la autoridad sanitaria de mantener el distanciamiento físico con otras personas, hizo que tanto el comercio como otras áreas del quehacer tuvieran un fuerte traslado hacia las esferas digitales.

Una de esas áreas, y tal vez la más afectada por la pandemia, es la educación, que no ha podido retomar sus actividades con normalidad desde marzo de este año, una vez que se conocieron los primeros casos de covid-19 en nuestro país y todo el sistema suspendió sus quehaceres presenciales. Ello obligó a una rápida reconversión de los docentes, que tuvieron que echar mano a las plataformas tecnológicas que tenían a disposición para continuar con los procesos de enseñanza.

De ahí que el uso de las tecnologías aplicadas a la educación sea una tema en extremo relevante y a la vez muy necesario, dado el contexto que vive nuestro país, más cuando aún no se encuentra una vacuna que ayude a combatir la enfermedad y, a pesar de todos los esfuerzos que se están realizando para hacer un retorno al aula presencial en marzo del próximo año, lo cierto es que aquello depende del control de la pandemia y las clases online bien podrían extenderse.

Y como una forma de difundir conocimientos dentro de esa realidad, Fundación AraucaníAprende, en colaboración con Corparaucanía, realizó hace algunos días un interesante seminario online que relevó la importancia que ha adquirido el uso de herramientas tecnológicas en la enseñanza de la escritura, denominado "Tecnologías para enseñar a leer".

El evento fue transmitido vía streaming por distintas plataforma y contó con más de 1.400 visualizaciones y 585 conectados de manera simultánea, lo que deja en evidencia la importancia de esta temática a nivel regional.

De ahí que sea necesario no solo valorar estos esfuerzos locales por abordar temas relevantes y necesarios, sino también insistir en la necesidad de seguir entregando conocimiento y discusión en torno al uso de las tecnologías en la educación, una materia elemental en tiempos de pandemia y que de seguro seguirá presente como una estrategia eficaz en el área de la enseñanza.

Existe en la actualidad -como nunca en nuestra historia planetaria- la tendencia a considerar a la juventud como un valor, y lo es. No son solo el futuro sino también el presente.

En nuestro país ha demostrado madurez y conciencia respecto a la necesidad de mejorar las condiciones de vida. La juventud es inconformista, aspira a realizarse durante su vida y observa que nuestro país no le otorga todas las posibilidades con las que anhela.

Hay jóvenes profesionales y técnicos que no tienen cabida en el mundo laboral, hay jóvenes obreros y campesinos que ven reducidas sus posibilidades de tener vidas más plenas.

En el otro extremo estamos los de la tercera edad, la gran mayoría con pensiones miserables, con enfermedades y malestares no bien tratados por una medicina que es cara y discriminatoria.

Creo respetuosamente que así como se valora a la juventud, existe una tendencia a despreciar a los viejos y una cultura transversal a todas las generaciones, que se expresa en ocultar la edad como si cumplir años fuera una vergüenza.

Esto último es preocupante, porque ser viejo no es sinónimo de ser inútil. Una mujer o un hombre de más de sesenta años, cualesquiera sea su condición social, sigue siendo productivo, sigue siendo inteligente y tiene a su favor la experiencia de una vida, compleja como todas las vidas, que le aporta un grado de sabiduría.

Hoy los de la tercera edad, según sus posibilidades, se incorporan al uso de las nuevas tecnologías, asisten a conferencias, a conciertos, ven obras de teatro, adquieren nuevos conocimientos, se convierten en artesanos en madera, en greda, en tejidos y otras actividades, lo que se ha facilitado por las posibilidades que otorgan el uso de las nuevas tecnologías de la comunicación, acentuadas por la pandemia que nos afecta, además cuidan y enseñan las tareas de los nietos.

Son muchos los ejemplos de mujeres y hombres de la tercera edad que demuestran lo que afirmo, entre ellos la chilena Carla Cordua, filósofa de más de noventa años que continua vinculada a la academia, y el biólogo Humberto Maturana, también de más de noventa años y que sigue trabajando en la universidad, publicando interesantes obras y artículos. Ambos están perfectamente lúcidos.

Podemos dar otros ejemplos de fama universal como Goethe, cuya obra más notable fue "Fausto", la que terminó de escribir al final de su larga vida. O el caso de Beethoven, cuya obra musical más importante la terminó antes de fallecer, me refiero a la Novena Sinfonía, compuesta en avanzada edad, estando enfermo, aislado socialmente y completamente sordo, no obstante lo cual es un himno a la vida y a la hermandad entre los hombres.

En mi modesta opinión, la tercera edad es un segmento social insuficientemente valorado y marginado de aportar a la construcción de la nueva sociedad, no obstante tener las condiciones para hacerlo, incluidos los más humildes.

Roberto Muñoz Barra,

exsenador, presidente Instituto

Estudios Públicos Social Demócrata

Los trabajos de interconexión de nuevas matrices en la red de agua potable de Temuco, serán terminados en mayo del próximo año.

Los fondos asignados ya se habían gastado en su totalidad, pero se contará con una suplementación de dineros por parte del Ministerio de Obras Públicas.

Campaña busca frenar

a la chaqueta amarilla

"¡Avispa-T" se llama la cruzada que insta a capturar reinas de avispas chaqueta amarilla, instancia que está en su último mes de acción. La finalidad es frenar el avance de esta plaga, que afecta fuertemente a la apicultura ya que ingresa a las colmenas y ataca a las abejas consumiendo las larvas y la miel.

Destruyen maquinaria

en atentado incendiario

Tres máquinas utilizadas en la extracción de áridos fueron incendiadas al interior del predio de una empresa ubicada en la ruta Temuco-Nueva Imperial, dejando pérdidas millonarias.

El dueño de la empresa señaló que no hay seguros comprometidos y que anteriormente ya habían recibido distintos tipos de amenazas.