"La política habitacional actual no da para satisfacer la demanda de soluciones habitacionales"
El secretario de Estado ha recorrido casi todas las regiones, constató un aumento de tomas en tres de ellas, dice que los números a las postulaciones de subsidios de arriendo son impresionantes y se refiere a la contingencia política.
En menos de dos años Felipe Ward ha sido ministro de tres carteras distintas. Partió en Bienes Nacionales, siguió en la Secretaría General de Gobierno y desde junio desde este año se desempeña en Vivienda y Urbanismo. Todo un récord. Confiesa que el servicio público es lo que le entusiasma y que le fascina donde está ahora, porque "la política pública más relevante es la de la vivienda", afirma.
Ward dice que ha podido visitar muchos lugares de Chile pese a la pandemia y que es un convencido de que la ciudadanía se ha comportado bien ante las restricciones. También cree que la historia finalmente será la que muestre si el manejo de la crisis sanitaria fue la apropiada.
-En mitad de la pandemia usted decía que ya habíamos retrocedido 10 años en cuanto a la vivienda. ¿Cómo estamos ahora?
-Bueno, se tomó la decisión de trabajar en los asentamientos precarios, campamentos y tomas, dado el aumento que han registrado en los últimos meses producto especialmente de la situación de vulnerabilidad económica producto de la pandemia. Este será un esfuerzo conjunto del mundo privado y público, entre varios ministerios, y vamos a continuar hasta el fin de este gobierno y ojalá que el próximo también pueda continuarlo. Porque si bien en el último tiempo, y especialmente en 2020, se cerraron 190 campamentos, las tomas han aumentado en las regiones Metropolitana, de Antofagasta y de Valparaíso, y si bien vamos a seguir trabajando con aquellas personas que están postulando a través de los procesos que estipula la ley o a través de la formación de comités de vivienda, para nosotros las personas que están en campamentos no son invisibles.
-¿Cuáles son esas medidas?
-Primero, estamos implementando un sistema de detección temprana, de modo que se evite la creación de nuevos asentamientos precarios. Estamos convencidos de que no es un buen lugar para vivir no tener los servicios básicos de agua, alcantarillado o luz. Esto implica problemas de que si uno analiza la cantidad de tiempo que esas personas pasan en esos lugares, los van a acompañar como familia, eventualmente, como por 10 años. Vamos a trabajar junto a los ministerios de Desarrollo Social, Interior y Secretaría General de la Presidencia y municipalidades para detectar a las familias antes de que tomen la decisión de irse a vivir a un campamento. Le pongo un ejemplo: tenemos un instrumento, que es el del arriendo, que nos permite entregarles una solución a las familias que están imposibilitadas de seguir pagándolo. Entonces, queremos llegar antes de que tomen la decisión de irse a un campamento o una toma.
-Estos son temas de mucha urgencia. ¿Se han acortado los plazos? ¿Se agilizaron los procedimientos de postulación?
-Efectivamente, uno de los procesos más importantes que ha vivido el ministerio es que todos los programas a todos los subsidios que tenemos se puede postular vía online. Es una transformación que hubiera costado al menos cinco años, pero que producto de la pandemia se hizo un cambio que será para siempre. Prácticamente el ciento por ciento se hace online y eso ayuda a las personas. Igual hay una brecha tecnológica y por eso asistimos telefónicamente a quienes no tienen mucha facilidad de manejarse en internet. Para ellos va a haber un acompañamiento por parte del ministerio.
-¿Cuánta gente ha postulado?
-Los números son impresionantes, son 500 mil postulantes a los subsidios de arriendo. Eso es algo que supera varias
"No sacamos nada garantizando un techo si bajo este no se puede formar una familia y vivir de manera digna. Es el objetivo de nuestra administración y eso es lo que vamos a realizar".