"Cuando participo en una mesa de conversación, incluso en el Ministerio de Salud, yo espero mi turno, levanto la mano y cuando ya no me hacen caso golpeo la mesa. Así me hice acreedora del apodo de Margaret Thatcher por parte de un ministro. Y en el Hospital de Temuco me dicen la Doctora Quinn, la Doctora del Pueblo, por me siempre la juego para conseguir ayuda para los pacientes".

Así se presenta a sí misma Victoria Urrutia Valencia, actual candidata a concejala por Temuco en calidad de independiente al alero del Partido Humanista, pero quien por largos años ha figurado como integrante y dirigenta de los consejos de la sociedad civil (Cosoc) del Hospital Hernán Henríquez Aravena y del Servicio de Salud Araucanía Sur, de los cuales es directora y secretaria, respectivamente.

Desde ese lugar y quehacer confiesa que jamás quiso postular a un cargo, pero las circunstancias la llevaron a sumir el compromiso y hoy lleva adelante su candidatura muy a pesar de que su vida ha dado un giro tremendo al tener, actualmente, grave a su hermana luego de que se complicara después de enfermar de covid, situación que la tiene en un viaje ida y vuelta entre Temuco y Valdivia, semana tras semana.

Originaria de Liquiñe (Panguipulli), estudiante secundaria en Villarrica y habitante de la capital de La Araucanía hace 40 años, esta mujer, madre de cuatro hijos, madre guardadora, fan de Deportes Temuco, exintegrante del Coro del Teatro Municipal Temuco, motivadora estudiantil, paciente crónica de artritis reumatoide refractaria y de la enfermedad de Meniere, y emprendedora (en el rubro de los muñecos de lana, mermeladas, kuchenes y queques), quiere llegar al Concejo Municipal para levantar todos aquellos temas de salud por los cuales durante largos años ha marchado por las calles de la ciudad.

- Victoria, ¿cómo surge su candidatura al concejo municipal?

- La verdad es que esta situación me ha tomado por sorpresa porque a mí nunca me ha gustado la política. Yo siento que como dirigente hago más en los consejos de salud en los cuales participo. Pero sucede que el Partido Humanista me invitó por un tema de paridad de género. Yo acepté. Entonces, pensé que era para terminar de armar una lista, pero era algo definitivo. Y aquí estoy. Yo voy como candidata independiente. Pero debo reconocer que esto es algo nuevo para mí y ha resultado ser una tarea muy solitaria.

- ¿Por qué le ha resultado una tarea solitaria?

- Porque aquí nadie ayuda a nadie. Todo depende de los propios candidatos y su círculo cercano. Yo no me manejo en internet y recién ahora me ayudaron con un folleto para difundir en la web. Lo único que tengo son diez palomas que aún no he podido instalar por la cuarentena.

- Desde su experiencia dirigencial, ¿en qué temas está al debe la comuna con los usuarios del sistema de salud?

- Lo primero a decir a nivel general es que hace falta que se reconozca a los consejos de la sociedad civil, porque somos los que peleamos los recursos y si estos no resultan marchamos por las calles. Ahora, en Temuco, por muchos años pedimos una mejor infraestructura y ahora que está no tenemos los profesionales y la materia prima, que son los medicamentos. Y en este tiempo de pandemia se nota más la falta de profesionales. Yo digo que la carencia más grande en los Cesfam, Cecof y en todos lados es la atención médica. Hay muchos enfermos y pocos profesionales. Eso genera que aún no desaparezcan las listas de espera, por eso los usuarios se levantan a las 6 de la mañana para sacar un número de atención. También hay mucha necesidad en todo lo que tiene que ver con mamografías y la pesquisa de cáncer cérvico uterino. Además, no puedo dejar de mencionar las demoras en las interconsultas con el Hospital de Temuco, especialmente, las relacionadas a pacientes con cáncer.

- ¿El llamado entonces es a que las autoridades escuchen más a los concejos de la sociedad civil?

- Por supuesto, las autoridades deben escuchar a los Cosoc. No crean que por el hecho que no tenemos títulos y estamos en casa desconocemos el tema, muy por el contrario, los dirigentes nos hemos empoderado y cuando nos sentamos a una mesa manejamos mucha más información que otros participantes. En todo caso yo no me complico. Por algo me dicen la Margaret Thatcher en el Minsal y la Doctora Quinn o Doctora del Pueblo en el Hospital de Temuco. Son dos apodos que llevo con mucho orgullo.

- ¿Qué apreciación tiene del rol de las mujeres dirigentes y de la mujer en general en las esferas de poder?

- Yo creo que el asunto hoy no es solamente abrir más espacios para la mujer, sino que las mujeres se crean el cuento y le den el voto a otras mujeres. Falta que seamos nosotras las que luchemos por nuestro espacio y nos apoyemos; y más cuando se trata de mujeres sin título profesional, pero sí con experiencia y conocimientos, porque yo soy doctora, administradora y abogada en mi propia casa.

- Victoria, en las próximas elecciones reprogramadas para mayo, ¿por qué el electorado local debería darle su voto?

- Pienso que deberían darme la oportunidad porque nosotros los dirigentes fuimos quienes exigimos cambios en la calle, nosotros marchamos por años, así que por qué no darle la oportunidad a una mujer dirigente. Cuando me preguntan ¿tienes un programa? Yo respondo: no pues. Yo luché por largos años, para qué quiero un programa cuando sé por lo que peleamos y soñamos. ¿Por qué creer en mí? Porque yo marché para conseguir los cambios que hoy están por venir. Quisiera aprovechar de enviar un saludo a toda la gente que hoy está con covid. Yo tengo a mi hermana en agonía producto de la enfermedad y quiero mandarle mis mejores deseos a Luis Vivanco para que supere esto también.

"Por muchos años pedimos una mejor infraestructura y ahora que está no tenemos los profesionales y la materia prima, que son los medicamentos. Y en este tiempo de pandemia se nota más la falta de profesionales (de la salud)".

"Falta que seamos nosotras las que luchemos por nuestro espacio y nos apoyemos; y más cuando se trata de mujeres sin título profesional, pero sí con experiencia y conocimientos, porque yo soy doctora, administradora y abogada en mi propia casa".