Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Cartelera y Tv
  • Espectáculos
ENTREVISTA. Marcela Cubillos, constituyente por la UDI:

"Quienes tienen la hegemonía de la Convención deben conducirla con respeto para los 155"

Exministra quedó con una sensación "mala" tras la primera semana y advierte que el PC y el Frente Amplio pueden "pasar máquina".
E-mail Compartir

Marcela Cubillos, exministra de Medio Ambiente, de Educación, exdiputada y exsecretaria ejecutiva de la Fundación Libertad y Desarrollo, ha estado más activa que nunca en Twitter durante la primera semana de funcionamiento de la Convención Constitucional. La abogada y constituyente por el Distrito 11 (La Reina, Las Condes, Lo Barnechea, Peñalolén y Vitacura), segunda mayoría nacional en la elección del 15 y 16 de mayo, luego de su colega Daniel Stingo, ha usado la red social para marcar sus claras diferencias con la forma en la que está operando la asamblea que redactará la propuesta para una nueva Constitución. Y no se ha guardado nada.

-¿Qué sensaciones le deja la primera semana de funcionamiento de la Convención?

-Con una mala sensación. La verdad es que desde la instalación hasta ahora, aquí han pasado cosas que no son positivas. En la instalación vimos cómo un grupo intentó por la violencia que el acto no se desarrollara. Vimos una falta de respeto no solo al Himno Nacional, sino que a los jóvenes que estaban ahí tocando para los constituyentes. Y te diría que además lo que ha ocurrido tiene varios ejes que son preocupantes. Primero, está funcionando como un segundo Congreso, como tanto lo habíamos advertido, uno dedicado a la política y nada al trabajo constituyente, haciendo noticia por el aumento de cargos y de recursos y además con una "cocina" igual a la que tantas veces han condenado. Piensa que las sesiones se suspenden muy rápido para dar horas a que se pongan de acuerdo y así volver a la sala. Y si no hay acuerdo, se vuelven a suspender las sesiones y, todo esto, por supuesto, sin transparencia. Porque cuando se suspende, se acaba la transmisión y operan las "cocinas" para llegar con previos acuerdos a las votaciones.

-¿Cómo cree que será la segunda semana?

-Esta semana lo que hay que cambiar es la forma de conducción. Hay que dejar claro quién está a cargo de esta Convención Constitucional. Y quienes tienen la hegemonía son el Frente Amplio y el Partido Comunista. Ellos están a cargo. Ellos tienen la mayoría, ellos dirigen la mesa y por lo tanto ellos son los que tienen que hacerse responsables y cambiar la forma de conducir. Aquí tiene que respetarse la igualdad ante la ley de los 155 convencionales. Un ejemplo: se reparten por sorteo los espacios en las distintas salas. Pero Francisca Linconao, no: se queda en el Salón de Honor y se le sienta igual en primera fila pasando a llevar al resto de los constituyentes y asiste acompaña de un asesor permanentemente. Espero objetividad, menos sectarismo, menos discrecionalidad para dar garantías a todos los convencionales. Y además, que nos dediquemos a los temas que son nuestra competencia, no como esta semana, que la única declaración que se saca es una que excede y viola las competencias de la constituyente.

-En procesos similares otros países también han sido caóticas las primeras semanas, mientras se fijan los reglamentos y la asamblea comienza a encontrar su propio ritmo e institucionalidad. ¿No es esperable que esto decante en las próximas semanas?

-Es que lo que hay acá no es desorden, sino arbitrariedad y sectarismo. El primer día puede haber habido una falla técnica y eso se subsanó. Cuando el vicepresidente repite una votación que está cerrada simplemente porque le van a reclamar de hecho a la mesa sus amigos, eso no es desorden tecnológico, eso es arbitrariedad. Cuando ayer (jueves) no te quieren dar derecho a votar en contra y tienes que reclamarlo, eso no es un problema tecnológico, eso es sectarismo. Cuando no tienes transparencia en la forma en que se da la palabra y no te la quieren dar, eso no es tecnológico, es sectarismo. Cuando has hecho como sector una propuesta de funcionamiento para los primeros 30 días y no están dispuestos ni siquiera a destinar una sesión para discutirlo, sino que simplemente imponer las reglas que define la mesa, eso es sectarismo.

-¿De qué modo cree usted que el grupo de ChileVamos puede integrarse para lograr algún espacio, considerando que son minoría?

-Acá los que tienen que tener disposición para integrar a todos los sectores, aunque no tengan las mayorías que se requiere, son quienes tienen a su cargo y tienen el poder dentro de la Convención. Si aquí el Frente Amplio y el PC quieren pasar la máquina y conducir solos y no integrar al resto de las minorías, por supuesto que tiene los votos para hacerlo, pero es una pésima señal para la elaboración de una Constitución.

-¿No ha logrado tender puentes con otros sectores?

-Siempre hay diálogo y tenemos toda la disposición, pero de acá lo que se trata es que estos diálogos sean con transparencia, esa era la demanda, si hasta el Congreso es más transparente. En la Cámara de Diputados se debaten por horas los temas en que todos tienen derecho a saber cuánto tiempo tienen, cuándo se les va a dar la palabra. Es lo lógico. Y debate y votaciones transmitidas, pero aquí la votación del miércoles para aumento de vicepresidencias se hizo a puertas cerradas y sin transmisión. Lo que corresponde es que quienes tienen la hegemonía de la Convención se hagan responsables y conduzcan esto con respeto para los 155 convencionales.

-¿Cómo debiera canalizarse la participación ciudadana?

-La sociedad civil tiene que estar muy integrada, porque el sistema electoral a través del cual se elige esta Convención no representa muchas veces el Chile real. Cuando tienen una convencional como Elsa Labraña que saca el 3% de los votos y su planteamiento es sustituir el Himno Nacional, eso no es representativo del Chile real. Cuando tienen convencionales que pifian mientras se canta el Himno Nacional, eso no es el Chile real. En Chile nadie pifia ni siquiera los himnos extranjeros en los estadios. Por lo tanto, la sociedad civil tiene que estar muy activa, porque estoy convencida de que ellos creen y defienden y promueven libertades que están muy arraigadas y que no representan muchas veces posturas ideológicas extremas que están hoy día en la Convención.

-Hay muchas voces, incluso de su sector, que han dicho que esta es una Convención que sí es muy representativa del Chile real.

-Yo lo que he visto esta semana no es así. Tenemos que la representación de los pueblos originarios es ideológica, tenemos un sectarismo con los ejemplos que he puesto. Si haces una encuesta nacional, ¿tú crees que la mayoría estaría por cambiar el Himno Nacional? ¿Estaría de acuerdo con pifiarlo? ¿Tú crees que la mayoría está de acuerdo con otorgar más recursos a la Convención? ¿Tú crees que la mayoría está de acuerdo en que haya una semana en que no se trabaje ningún tema constitucional y solo se trabajen temas políticos de validación de la violencia? Por lo tanto, ojo con confundir la representación electoral con lo que quiere el país. Para salir de dudas, la sociedad civil tiene que estar muy integrada a este proceso constituyente.

-Cuando comience a redactarse la Constitución, ¿cuáles son a su juicio los tres temas más importantes que debiera contener?

-Para mí es fundamental un eje que es el que estamos viendo. Hay sectores que creen que las mayorías pueden hacer lo que quieran o ejercer el poder a su antojo y en cualquier democracia liberal eso no es así. Porque los derechos de los ciudadanos tienen que ser respetados y defendidos siempre. Por lo tanto, lo primero es que una Constitución se hace para limitar el ejercicio del poder y para garantizar esos espacios de derechos y libertades de los ciudadanos. El segundo eje es que se establezca o se garantice mayor poder para el ciudadano para poder exigir siempre un buen servicio del Estado. Hoy día las personas que dependen de los servicios del Estado no tienen cómo exigir sus derechos cuando se paralizan las funciones, cuando los maltratan, cuando no los tratan con igualdad y con dignidad. Y el tercero es que en la forma de garantizar los derechos sociales se siga promoviendo y respetando la colaboración público-privada. Jamás vamos a poder garantizar el acceso a la vivienda acceso a la educación de calidad o mejor salud si solo dependemos de lo que el Estado pueda entregar.

-Usted fue una de las caras del Rechazo y hoy es constituyente. ¿Se arrepiente de haber entrado?

-Estoy orgullosa de haber votado Rechazo y no me arrepiento de haberme presentado a la Convención Constituyente. Cuando fuimos derrotados, tenía claro que en el proceso constituyente que ya empezaba había que estar allí.

"La Convención está funcionando como un segundo Congreso, como tanto lo habíamos advertido, uno dedicado a la política y nada al trabajo constituyente".