Pitrufquén: instalan la primera piedra de San Juan Evangelista
IGLESIA. Gobernador Rivas, alcaldesa Romero y obispo de la Diócesis encabezaron ceremonia.
El terremoto de 2010 provocó graves daños a la Iglesia San Juan Evangelista de Pitrufquén. A poco andar esta parroquia -situada en el casco histórico de la ciudad- debió ser demolida. Hoy, una nueva etapa comienza con la puesta de la primera piedra que da el vamos para reponer esta significativa edificación.
El gobernador regional Luciano Rivas encabezó este encuentro junto a la alcaldesa de la comuna, Jacqueline Romero. Una emocionante ceremonia marcó el inicio simbólico de las obras, que contó con la presencia de autoridades, consejeros regionales y dirigentes y vecinos de la comuna, quienes tras esperar más de 10 años hoy ven materializado este sueño.
Pala en mano
Intervinieron en la ceremonia el párroco de la iglesia a reconstruir, Gabriel Salas, y el obispo de la Diócesis de Villarrica, Francisco Javier Stegmeier. Tras la bendición del obispo, los asistentes se dirigieron al sector de las obras donde cada uno de ellos, con palas en sus manos, dieron simbólicamente inicio a la obra.
La máxima autoridad de La Araucanía destacó que "como Gobierno Regional nos sentimos muy contentos de acompañar a la alcaldesa y a los habitantes de Pitrufquén en este importante momento. Fue gracias a las gestiones de la misma comunidad que se obtuvieron los recursos que dan la partida a esta gran obra".
El también presidente del Consejo Regional, Luciano Rivas, explicó además que "esta ayuda de financiamiento gestionada por el Gobierno Regional se fundamenta en la importancia de mantener la memoria patrimonial y urbana de la ciudad".
La alcaldesa de Pitrufquén, Jacqueline Romero, expresó que "estamos muy orgullosos de colocar hoy la primera piedra de nuestro templo San Juan Evangelista. Es un orgullo para mucha gente que trabajó durante 10 años para que esto se concretara".
El sacerdote Gabriel Salas, párroco de la comuna, destacó, emocionado, que "esto se esperaba porque somos gente de fe. Cuando hay fe, uno siempre abriga esperanza de que las cosas se irán concretando, y aunque no se concreten tienes la energía y la fortaleza de empeñarte nuevamente y seguir adelante, y ese es el ir y devenir de la vida, y eso nos mantuvo siempre a nosotros optimistas".