Estado de Excepción
El Senado verá esta tarde la eventual extensión del Estado de Emergencia en La Araucanía. El diálogo para enfrentar problemas complejos es necesario y por eso es importante insistir en la búsqueda de acuerdos.
La presidenta del Senado, Ximena Rincón, confirmó que esta tarde se verá la extensión del Estado de Excepción en La Araucanía, en virtud de los antecedentes que aporte el Gobierno a los parlamentarios respecto de la efectividad de la medida.
La zona vive un momento complejo, sacudida por los últimos episodios de violencia. Lo anterior se suma a la preocupación que deben generar situaciones que han acompañado a estos sucesos en los últimos días. Uno de ellos fue la difusión de un video que se atribuye la organización violentista Weichan Auka Mapu en el que exige a las Fuerzas Armadas y policiales a abandonar el territorio y realiza un llamado al "levantamiento armado de las comunidades".
En el registro audiovisual se muestra a varias decenas de encapuchados en medio de un terreno boscoso, todos portando armas largas en sus manos, premunidos de chalecos antibalas, cascos, utilizando vestimenta militar y evidenciando el porte de gran cantidad de municiones.
Frente a esta exhibición de fuerza, el delegado presidencial para la Macrozona Sur, Pablo Urquízar, planteó una legítima interrogante. "Yo me pregunto: frente a orgánicas radicalizadas y terroristas que tienen a más de 40 individuos con fusiles de guerra. ¿En verdad creemos que tenemos que dialogar?".
Otro hecho que resulta lamentable es que la recepción del cuerpo del comunero fallecido el miércoles pasado en Cañete, haya sido acompañada por una caravana vehicular desde la que se efectuaron múltiples disparos al aire, también registrados en videos captados por habitantes del sector.
Sin duda, el diálogo para enfrentar problemáticas complejas es necesario y por eso es importante insistir en la búsqueda de acuerdos y soluciones de largo plazo. Pero aquello no puede ser excusa para dejar pasar situaciones absolutamente inaceptables que requieren de ser enfrentadas con urgencia para recobrar la seguridad pública en un territorio donde una amplia mayoría de sus habitantes son víctimas silenciosas del terror y la imposibilidad de vivir en paz, al no poder desplazarse libremente o -peor aún- ser víctimas de ataques, quemas y atentados en general.