Casinos irregulares, un fenómeno cíclico que tiene a las autoridades en pie de guerra
Los juegos de azar ilegales son un problema recurrente en la capital de La Araucanía. Penalizados por funcionar al margen de la ley y con el riesgo de dar cabida al eventual lavado de dinero, estos locales son perseguidos y cerrados una y otra vez. El fenómeno es tal, que solo entre agosto y octubre de este año 17 establecimientos fueron "reclausurados". Hoy el municipio local se ocupa del tema. Desarrolla un plan de rescate del centro urbano y establece una estrategia jurídica para ponerle freno a la ilegalidad.
Un verdadero gallito administrativo y jurídico es el que protagonizan hoy las autoridades comunales y regionales de diversos servicios e instituciones y los propietarios de locales de juegos de azar ilegales que funcionan en el centro de la capital regional, sin patente y sin certificación que acredite que las máquinas en uso corresponden a juegos de habilidades y destrezas, y no a juegos azar.
El fenómeno es tal que solo entre agosto y octubre de este año, es decir, en el plazo de los últimos tres meses, y producto de las fiscalizaciones coordinadas que involucran a la Municipalidad de Temuco, policías e instituciones como Extranjería, Superintendencia de Casinos e Impuestos Internos, un total de 17 establecimientos fueron "reclausurados" por ejercer una actividad económica sin patente municipal y por flagrancia de rotura de sellos instalados con anterioridad por inspectores municipales.
Así lo confirma la Dirección de Seguridad Pública del municipio local, entidad que además destaca que como resultado de los operativos en cuestión hubo tres decomisos de cigarrillos y alcohol, y un saldo de siete personas detenidas.
Lo que hoy ocurre es que se ha desatado una verdadera guerra contra la ilegalidad bajo el objetivo comunal de la actual administración municipal de recuperar la identidad del centro urbano de Temuco.
Así lo explica el alcalde Roberto Neira, quien reconoce una disputa en tribunales producto del trabajo de fiscalización emprendido en la ciudad para regular o contener esta situación, disputa que se expresa en la presentación de una serie de procedimientos o recursos judiciales interpuestos por un grupo de 24 locatarios que "no han tenido éxito en sala".
"La situación puntual es que estos locales no tienen patente municipal para funcionar, por ende, se encuentran en la ilegalidad y si bien los locatarios han emprendido acciones judiciales no han tenido éxito en sala, sobre todo, porque no han podido certificar que las máquinas que instalan son de habilidad y destreza y no de azar como lo exige la superintendencia y la ley vigente. El asunto aquí es que muchos han seguido funcionando de forma clandestina y ante ello hemos iniciado estos procesos de fiscalización intersectorial que incluyen la presencia de Carabineros, PDI, Extranjería, Rentas y Patentes y Seguridad Pública, entre otras entidades", relata el jefe comunal.
El edil precisa que el tema de fondo que justifica esta pugna administrativa y judicial es la recuperación del centro de la ciudad para la ciudadanía.
"Hemos conversado con las cámaras de Comercio y con las instituciones públicas lo que respecta a las áreas del comercio ambulante y también