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los establecimientos.
El secretario del directorio y docente, Víctor Machuca, explica que sin saber que se venía la pandemia, la fundación comenzó a tecnologizar a sus colegios, poco a poco, mediante la compra del servicio de fibra óptica y la adquisición de tablets gigantes para las salas desde prekpinder a octavo. El reto fue asegurar la cobertura en plena crisis.
"En ese contexto - explica el profesor - se consolidó el Departamento de Tecnologías para el Aprendizaje, Información y Comunicación, TAIC, que entre otros logros permitió conectar a profesores y alumnos mediante el sistema Starlink, el cual provee internet satelital".
Con el propósito de profundizar conocimientos y entregar más y mejores herramientas al profesorado en esta etapa de desarrollo institucional, la fundación tiene programada una actividad para el segundo semestre. Se trata del seminario de "innovación pedagógica", que realiza en octubre y para el cual ya está confirmada la participación de una relatora de España que estará al frente de la jornada.
LA FAMILIA
De la mano de 1.700 profesores y profesoras y 1.300 asistentes de la educación que hacen posible el milagro de la educación en 4 jardines infantiles, 12 establecimientos de educación media y 85 escuelas de enseñanza básica, concentrados principalmente en la provincia de Cautín, hoy la Fundación Magisterio de La Araucanía no solo concentra sus esfuerzos en cambiar el modelo de aprendizaje, sino también en integrar a las familias de su estudiantado al proyecto educativo.
"Queremos llegar también a la familia, que para nosotros es el núcleo más importante, porque detrás de cada estudiante hay un grupo familiar que tiene realidades distintas y que se forma expectativas respecto de su colegio. Llegar a esa familia, saber lo que quiere para sus hijos y, desde allí, trabajar para dar cumpliendo a esas expectativas, es nuestra siguiente meta", explica el presidente de la fundación, Rodolfo Nahuelpán.
En sintonía con la participación de la familia, el magisterio enfoca sus esfuerzos en consolidar también un buen ambiente escolar para el bienestar de sus estudiantes y bajo esta lógica cuidan la convivencia a través del Departamento Pastoral y Convivencia, desde el cual abordan del buen trato desde la perspectiva pastoral.
"La experiencia nos ha dado buenos resultados, porque hemos llegado muy bien a los niños, a los profesores, a los asistentes y a las familias. Institucionalmente, desde el Departamento Pastoral, abordamos este tema y canalizamos la coordinación de todo mediante el Departamento de Educación", comenta el presidente.
VISIÓN
Esta institución tiene una visión bien clara y precisa de sus estudiantes y de lo que desea para ellos.
"Vemos al estudiante como un agente de cambio. Eso es lo que soñamos, que nuestros alumnos puedan ser ciudadanos libres, autónomos y emprendedores. Para conseguirlo procuramos fortalecer los valores. Nosotros contamos con tres valores rectores que son básicos en toda persona. Estos son: la libertad, la comunión y el respeto. La idea es desarrollarlos sobre la base del diálogo cultural y el evangelizar. Esto último nos indica cómo disponernos al servicio de la comunidad. Y por supuesto, también está el valor de aprender", detalla Rodolfo Nahuelpán.
Una tarea que demanda recibir y educar alumnos nuevos cada año no puede asumirse sin tener grandes motivaciones. Estas - explican los directivos - pasan por relevar la innovación y el emprendimiento como expresiones de presente y futuro. "Bajo estos dos conceptos deseamos elevar la condición de nuestros niños y niñas para que puedan vivir mejor y puedan también mejorar este mundo; hacer posible que tengan las herramientas para cambiar su vida y para cambiar vidas", precisa Nahuelpán.