Desarrollo armónico de La Araucanía
Diez comunas fueron identificadas como susceptibles de quedar bajo la categoría de zona de rezago en la Región. La Región ya cuenta con dos áreas bajo la categoría de zonas de rezago: Costa y Malleco.
Tras una serie de análisis de distintas variables y necesidades de inversión pública, diez comunas de la Región de La Araucanía están nominadas como susceptibles a quedar bajo una zona de rezago. En términos sencillos esto quiere decir que se trata de comunas que tienen un menor grado desarrollo y que es necesaria una intervención del Estado para que mejoren su condición.
Las comunas identificadas en este estudio corresponden a nueve de Cautín y una de Malleco, que aparecen como candidatas a la potencial creación de una nueva zona de rezago, debido a dificultades sociales, económicas y de servicios básicos como agua potable y conectividad. Se trata de Cunco, Curarrehue, Freire, Galvarino, Loncoche, Melipeuco, Padre Las Casas, Vilcún, Cholchol y Lonquimay.
El concepto de zona de rezago no es nuevo en La Araucanía. De hecho la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere) determinó dos áreas en esa condición: Costa, que está integrada por Carahue, Nueva Imperial, Puerto Saavedra, Teodoro Schmidt y Toltén; y Malleco, compuesta por Victoria, Ercilla, Collipulli, Traiguén, Los Sauces, Lumaco y Purén. La primera de ellas surgió de un análisis en el año 2016, tuvo su primera inversión en el año 2017 y su categorización está vigente hasta el año 2025. En tanto, la zona de rezago de Malleco, surgió de un análisis en 2019 y pasó a crearse en el año 2020, y estará bajo dicha categoría por ocho años.
Sin embargo, la normativa vigente permite que una región tenga solo dos zonas de rezago, por lo tanto, para que estas 10 nuevas comunas identificadas como "susceptibles" puedan ser parte de esa categoría, es necesario que una de las dos que están vigentes (Costa y Malleco) salga de dicha condición.
Ahora bien, el que estas zonas hayan sido indentificadas bajo esa condición, ya es un paso importante dado en la dirección correcta, en el sentido de vislumbrar condiciones habilitantes para el desarrollo social y económico armónico de una de las regiones con mayores indicadores de pobreza del país.
Resta esperar ahora el mecanismo que permita el desarrollo de estas comunas en el mediano plazo y con ello mejorar la calidad de vida de los habitantes de La Araucanía.