Restricción vehicular
Una de las medidas propuestas para bajar la alta congestión vehicular en la capital regional es la restricción. Las razones de la congestión vehicular están un sistema deficiente de locomoción y el aumento del parque automotor.
El retorno a la presencialidad en la educación en Temuco vino a reavivar un problema que ya venía manifestando ciertos indicios antes de la llegada del covid-19: la congestión vehicular. Sin embargo, a partir del inicio de las actividades en aula, hace ya una semana, lo cierto es que los atochamientos de vehículos en las calles de la ciudad en horas punta se tornaron caóticos y generaron no solo el malestar de los conductores, que reclaman por mejores condiciones de desplazamiento, sino que también motivaron la búsqueda de medidas que ayuden a paliar la situación.
Una de ellas es la que anunció el alcalde de Temuco, Roberto Neira, quien manifestó que solicitó al Ministerio de Transportes que evalúe la restricción vehicular en la capital regional. Se trata de una medida que -tal como lo plantea Neira- sería de carácter temporal mientras se aborda el problema de fondo y busca disminuir la presencia de vehículos en las calles con la suspensión de circulación de un 10 por ciento del parque automotor, esto es, un dígito por día.
Si bien la medida tiene adeptos y detractores, mientras este tema es analizado por el Ministerio y se decide su aplicación o bien la implementación de otras estrategias, lo cierto es que se puede avanzar en acciones concretas tendientes a hacer más fluido el tránsito en la capital regional. Una de ellas -entre muchas, por cierto- es mejorar la circulación en puntos críticos donde hay confluencia de calles de alta circulación que no cuentan con semáforos, lo que redunda tacos, toda vez la circulación de aquellos conductores que van por la vía sin preferencia de paso, dependen de la buena voluntad de otros automovilistas.
A ello se agrega arterias de alto tránsito que permiten el estacionamiento de vehículos, y que de corregirse esa situación - al menos a ciertas horas del día- se podría permitir una circulación más fluida de los vehículos.
Ahora bien, aunque lo ideal sería que trabajadores y estudiantes se movilizaran en el transporte público (o bien en medios alternativos, como la bicicleta), lo cierto es que aquello no va a ocurrir hasta que la ciudad cuente con un sistema eficiente. Y si bien se ha avanzado en esa dirección, con la habilitación de vías exclusivas y la futura implementación de buses eléctricos, se debe revisar también la frecuencia con la que circulan las micros en Temuco, ya que son habituales los reclamos de trabajadores y estudiantes en torno a la poca cantidad de máquinas en circulación.
Se trata a todas luces de un problema complejo que requiere de soluciones profundas, las que deben abordarse también con la participación de los principales involucrados en el tema, es decir, automovilistas, ciclistas y peatones de Temuco.