El Gobierno se reunió ayer con los partidos de Chile Vamos para debatir sobre las reformas tributaria (o pacto fiscal) y de pensiones, iniciativas que busca aprobar en el mediano plazo y para las que, además, ha tenido que ceder con gestos como la renuncia de Giorgio Jackson y el ajuste en el gabinete. La ministra vocera, Camila Vallejo, señaló tras la cita que "fue una reunión, y hay que decirlo, bastante honesta, franca, sincera y a ratos bastante dura también, pero muy necesaria".

"Es un primer paso", destacó Vallejo. Se acordó "seguir dialogando durante la próxima semana, porque entendemos que el diálogo es necesario cuando se pone en el centro a las personas". Al cierre de esta edición, sin embargo, no se conocía cuándo ocurrirá esta nueva cita.

El diálogo, agregó Vallejo, "nos permite no sólo sincerar posiciones, sino que ir encontrando aquellos puntos que posiblemente sean de encuentro", en materias como pensiones, pacto fiscal y probidad, a partir del Caso Convenios.

Sobre la reforma previsional, el Gobierno señaló que "en los próximos días vamos a postergar el ingresos de esas indicaciones. Y esta conversación no va a ser sólo con los partidos de Chile Vamos, sino con los otros partidos que han estado permanentemente dialogando con el Ejecutivo, presentando propuestas", como el PDG, Demócratas, DC, Amarillos por Chile y el Partido Republicano.

El Presidente Gabriel Boric lideró el encuentro y, antes de entrar, dijo que "soy plenamente consciente de lo difícil que ha sido que esta reunión se produzca para todos. Y por lo mismo, creo que es tremendamente positivo que se produzca".

Sergio onofre jarpa

Desde el interior de Renovación Nacional, ad portas de sus elecciones internas, surgieron fuertes críticas por la participación de su líder, Francisco Chahuán, en la cita con Boric, luego de que el Mandatario señalara que Sergio Onofre Jarpa, uno de los fundadores de ese partido, "terminó sus días impune".

Ayer Chahuán, al salir de la reunión, dijo que planteó a Boric la molestia por sus dichos y que se produjo uno de los momentos más tensos. "No se pueden construir puentes de diálogo si el gobierno, con sus declaraciones, los dinamita. Creemos sin lugar a dudas que las declaraciones respecto de Jarpa no pueden volver a repetirse".