"Las grandes empresas tenemos la responsabilidad de pagar mejores salarios"
El líder gremial habla del inédito proceso de reflexión entre los asociados, donde hubo un "análisis descarnado" para mejorar a través del diálogo la percepción que la ciudadanía tiene de empresas y empresarios. También aborda la recuperación económica en un contexto de incertidumbre, el cuarto retiro del 10% y su relación con la Convención.
Luego de tres meses de amplia reflexión, la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), uno de los gremios empresariales más poderosos de Chile, elaboró un documento con 181 iniciativas que buscan mejorar su relación con el resto del país. Conscientes de la mala imagen que algunas empresas y empresarios tienen, y que reflejan múltiples encuestas, dividieron oportunidades de mejora en cinco dimensiones: Cliente Ciudadano, Contratistas y Proveedores, Comunidades y Territorios, Trabajadores y Sostenibilidad. Las con más ideas plasmadas fueron las dos últimas.
Richard von Appen, presidente de la Sofofa desde mayo del año pasado, dice que hicieron un análisis descarnado y que todo este proceso fue parte de la gran falencia que, según considera, ha tenido el mundo empresarial: la falta de diálogo con el resto del país.
-¿Cómo podría resumirse este trabajo que realizaron?
-Creo que se resume en un gran tema que es el diálogo, que es justo lo que le falta al país, y que tiene que ser un diálogo genuino. Cuando nosotros entregamos nuestros productos y servicios es muy importante saber cómo los perciben nuestros clientes, que son la ciudadanía. Hemos detectado que hay bastante molestia, porque no se sienten bien atendidos, porque el servicio de posventa es malo, porque cuando hay un producto que sale defectuoso es muy difícil reponerlo. También, que hay asimetría entre la contratación y el cierre de los servicios. Vamos a trabajar con distintas instituciones tanto privadas como del Gobierno y el Sernac para ver cómo poder mejorar. Lo mismo con los trabajadores, buscando espacios de diálogo con los sindicatos y grupos negociadores, también con los comités paritarios; pero tiene que haber diálogo. Esto no se puede delegar. Esto tiene que ser liderado por la alta gerencia de cada empresa en la que se les cuenten los grandes desafíos en los que estamos enfrentando como empresa y escuchar recomendaciones que, al menos en mi experiencia, es muy valiosa, porque conocen profundamente lo que ocurre en la empresa. Lo mismo con los contratistas. Tenemos un tema donde hay una gran queja porque sienten que no se les considera como parte para desarrollar la empresa. Y después, con los territorios, definitivamente buscar muchas instancias y para eso es importante darles atribuciones, autonomía y poder de decisión a los liderazgos que están en regiones. La descentralización no debe ser sólo en el gobierno sino también en el mundo empresarial. Tenemos que tener gente que esté empoderada para tomar decisiones y que conecte y viva en las regiones, para que también se sienta que está contribuyendo como un ciudadano más.
-La gran queja contra las grandes empresas es el abuso. ¿Asumen esto?
-Esto fue un análisis bien descarnado, en lo cual no dejamos de levantar todos los problemas que había. Y ahí es importante destacar que hubo responsabilidades individuales. Asumir que todo el sector empresarial es así no es verdad, porque hay empresas buenas, malas y regulares. Y también hay personas dentro de las empresas que hacen mal su trabajo y eso hay que decirlo. Por eso es tan importante que esta reflexión vaya
"Vamos a ser claros para mencionar lo que es un delito y quiénes son las personas responsables, y que la empresa tiene que tomar medidas. Porque, si efectivamente son condenados, tiene que haber cambios y tienen que salir de la empresa. En eso no va a haber medias tintas".